domingo, 24 de abril de 2011

Capítulo 14. El amor está en todas partes.

Me monté con cuidado en el caballo blanco con ayuda de su propietaria y después ayudó a que Danny montara en el negro mientras que yo tomaba las riendas de mi caballo y comenzaba a salir despacio de la pequeña cuadra. Al principio, miedosos, hicimos que nuestros caballos caminaran despacio por la espesura sin árboles que nos había recomendado recorrer la mujer, pero en cuanto cogimos confianza comenzamos a trotar.
Era increíble la sensación que producía el aire azotándome con delicadeza el rostro y cómo algunos rayos de sol de la tarde me cegaban de vez en cuando. Cabalgamos aumentando la velocidad durante muchos minutos e incluso tardamos horas hasta que llegamos a un pequeño riachuelo. Danny, sin pensarlo, se metió en él y salió en pocos segundos y esperó a que mi caballo se atreviera a cruzarlo.
Llegamos hasta una zona rocosa donde era imposible entrar así que decidimos que era el momento de dar la vuelta para no tener que cabalgar cuando ya no hubiera luz solar. La mujer llegó en su vieja camioneta a la vez que nosotros y entre los tres dejamos a los caballos resguardados en sus cuadras, con comida nueva, para pasar la noche. La mujer se despidió de nosotros y se perdió de nuestra vista subida en su coche. Nosotros mirábamos desde la puerta como los dos caballos comían sin decir una palabra.
- No me quiero ir de aquí- dije con total sinceridad a Danny. Me gustaba estar con todos y lo pasábamos muy bien pero no podía renunciar a esos momentos a solas con él, me sentía tan especial que no lo cambiaba por nada.
- Nos podemos quedar todo el tiempo que quieras- contestó girando la cabeza para mirarme. Teníamos las manos enlazadas y el apretó su mano contra la mía lo que me hizo sonreír.
- Entonces quedémonos aquí- le pedí acercándome hacia él lentamente. Me besó y después comenzó a agacharse y se tumbó en el suelo.
Me tumbé junto a él, estiró el brazo y me rodeó los hombros, yo apoyé mi cabeza contra su pecho y comenzamos a mirar hacia el cielo. Estaba cambiando de color, de un azul cian a uno oscuro. El sol empezaba a esconderse por el horizonte y empezábamos a quedarnos a oscuras, pero no faltaba mucho para que la luna apareciera junto a las estrellas. Normalmente era el chico el que decía cómo se llaman las estrellas y las constelaciones pero Danny no tenía ni idea y aunque yo no era una experta en la materia intenté enseñarle lo poco que sabía.
- Esa creo que es la Osa Mayor- dije siguiendo el sentido de su dedo- O no... - dudé- bueno no lo sé.
- Da igual, la podemos llamar Brook- contestó, le miré sorprendida y él sonrió.
- Perdona, de los dos, la estrella eres tú, no yo- le espeté con tono de suficiencia.
- Porque tu lo digas...
- Claro, es verdad, perdona. Soy yo la que tiene un grupo de música, la que escribe canciones, la que tiene miles de fans, por mi se mueren miles de chicas...- dije con tono de burla.
- Miles de chicas no lo sé, pero yo me muero por tí- dijo para mi sorpresa. Cerré los ojos de pura emoción y le besé con fuerza. Le quería, le quería muchísimo pero no podía decírselo, sentía que en mi boca esas dos palabras no podían pronunciarse. Es que nunca lo había dicho, porque nunca había querido a nadie como lo quería a él, era más que amor, le necesitaba a mi lado, siempre.
- ¿Qué signo del zodiaco eres?- preguntó.
- Libra- dije muy segura.- Courtney es Piscis, como tú, cumple los años un día antes que tu.
- Ves, estas cosas son las que más raras me parecen- dijo de repente.- Tú lo sabes todo sobre mi y yo... apenas sé nada.
- No soy tan interesante como parece- le aseguré- mi vida es simple y sencilla.
- ¿Qué haces los sábados?- preguntó. En mi cabeza estuve segura de que tenía muchas preguntas por responder.
- Salgo con Ayleen, nos recorremos Oxford Street, vamos a Harrods o nos tumbamos en Hyde Park a ver la vida pasar- expliqué- pero si quieres mi opinión esas no son las mejores tardes.
- ¿Cuáles son las mejores tardes?- preguntó de nuevo con interés.
- Son en las que Ayleen viene a mi casa, o yo voy a la suya y vemos películas románticas de las que estás llorando un buen rato cuando acaban- le confesé con total orgullo.- Recuerdo el día en el que vimos Love Actually, no lloramos pero faltó poco- expliqué- ¿La has visto?
- No- dijo él.
- Y ¿Notting Hill?- volví a preguntar.
- Sí, creo que empecé a verla- admitió.
Adoraba hablar de mis tardes con Ayleen, por supuesto no tenía ni pensado nombrar aquellas tardes en las que ella y yo nos encerrábamos en la habitación, poníamos McFly y hacíamos todas las tonterías que se nos ocurrían, era demasiado ridículo como para confesarlo, además eran tardes secretas que no se cuentan nunca.
A pesar de que la noche había llegado y la temperatura había bajado un poco nosotros permanecíamos abrazados sobre el suelo sin ninguna intención de movernos de allí.
Nos quedamos en silencio y entonces comenzamos a escuchar a los grillos cantar y el silencio de la noche era tan apacible que poco a poco, con la mirada fija en el brillo de las estrellas y sintiendo el ritmo del corazón de Danny, mis ojos comenzaron a cerrarse aunque yo me resistía a ello. Entonces aquella situación me recordó a una de las canciones que más habían influido en mi, decía: " Te veo tumbado a mi lado, con palabras que nunca pensé que dirías, despierto y sin miedo". Comprendí que ya no tenía miedo de nada, de vivir, de caminar, estaba preparada para cualquier cosa, tal y como decía la canción.
Me desperté en la mitad de la noche por culpa de Danny. Al principio pensaba que estaba hablando por teléfono pero cuando escuché lo que decía me di cuenta de que estaba soñando. No decía nada en claro sólo palabras sueltas, algunas entendibles.
- No lo sabe- dijo la primera frase completa- No, no, no lo sabe- repitió como si estuviera hablando con alguien- Ya, se lo voy a decir, Tom- era Tom la persona con la que estaba soñando, sonreí y dejé que siguiera durmiendo.
Intentando descifrar lo que Danny le decía a Tom en sueños me volví a quedar dormida hasta que llegó la mañana. Danny estaba despierto mirando hacia el cielo como la noche anterior. Le besé al despertarme y después me desperecé. En ese momento me di cuenta de que mis prioridades habían cambiado, si hubiera tenido que hacer una lista sobre prioridades y numerarlas, nuestra relación habría ocupado el primer puesto. Sonreí satisfecha y volví a besarle.
Volvimos al hotel pronto, pues ya empezábamos a tener hambre. Cuando subí a la habitación Blake saltó de la cama para preguntarme sobre lo que habíamos hecho durante la noche, ella tenía ideas que no se parecían en nada a lo que yo la había contado pero cuando acabé estaba feliz, como si hubiera dicho lo que ella quería oír.
- Entonces ahora me toca a mí- dijo haciendo que yo no comprendiera- Dentro de poco Dougie caerá.
- ¿Cómo que caerá?- pregunté y después me sentí tonta.
- Pues que dentro de poco estará loco por mí- dijo muy segura de si misma. Me reí a carcajadas y después intenté asimilar la información.
"Así que Blake ha estado detrás de Doug y yo ni me he fijado" pensé en mi cabeza. Prometí fijarme en ellos dos cuando bajásemos al comedor y después hablaría con Danny si veía que Blake tenía alguna posibilidad. Era increíble verla flirtear con Dougie, se movía varias veces el pelo, pestañeaba dulcemente e incluso lanzaba sonrisas discretas en su dirección, pero Doguie parecía que no se enteraba de nada. Lo cierto es que sólo me había dado cuenta cuando ella me lo había dicho así que el resto no tenían por qué estar enterados, aunque parecía que a Blake eso no la importaba demasiado, ella seguía con sus tácticas de ligue y el pobre Doug ni siquiera se daba cuenta.
A media mañana comenzó a llover con intensidad, más fuerte que todas las veces anteriores. A la hora de la comida un espeso manto de lluvia cubría todo y nos hizo quedarnos en el hotel el día entero y no se nos ocurría nada para hacer, pero en un segundo se me ocurrió el plan perfecto para Danny y para mí.
Corrí hasta la habitación de Tom para pedirle ayuda, necesitaba un ordenador portátil y aunque el no tenía, Harry me prestó el suyo. Lo llevé hasta mi habitación, bajé las persianas y cerré las cortinas. Coloqué el portátil en la mesa supliendo a la televisión que había guardado en el armario y con las pocas velas que Tom y yo habíamos conseguido iluminé la habitación. Tom fue a buscar a Danny mientras yo buscaba Love Actually en internet, quería que conociera cómo era mi vida, porque ahora él era una parte de ella.
-          Espero que no pienses que es un aburrimiento- le confesé cuando empezaba la película.
-          Si me aburre, me duermo- bromeó y yo le di un leve codazo.

“Siempre que me siento pesimista por cómo está el mundo pienso en la puerta de llegadas del aeropuerto de Heathrow. La opinión general da a entender que vivimos en un mundo de odio y egoísmo pero yo no lo entiendo así, a mi me parece que el amor está en todas partes. A menudo no es especialmente decoroso ni tiene interés periodístico pero siempre está ahí, padres e hijos, madres e hijas, maridos y esposas, novios, novias, viejos amigos. Cuando los aviones se estrellaron contra las Torres Gemelas que yo sepa ninguna de las llamadas telefónicas de los que estaban a bordo fue de odio y venganza, todas fueron mensajes de amor…”
Mi mente comenzó a divagar por la película imaginando todos esos reencuentros en el aeropuerto y me imaginé allí, esa misma Navidad que llegaría en unos meses, esperando con impaciencia y que apareciera Danny, cargado con su maleta, que esquivara a todo el mundo y corriera para abrazarme. Un leve tosido de Danny me despistó y volví a centrarme en la película. Deseaba que le gustara tanto como me gustaba a mí.
-----------------------------------------
Para compensar los días en los que no he subido ningún capítulo hoy subo dos. Espero que os guste este capítulo, porque a mi me ha encantado escribirlo, no sé exactamente por qué. Tengo que deciros que si no habéis visto Love Actually tenéis que verla, yo he aprovechado este capítulo para volver a verla. La canción a la que me refiero es Famous Last Words de My Chemical Romance, por si alguien se lo pregunta, una de las mejores canciones que he escuchado. Bueno y para terminar tengo que darle las gracias a todas las personas que leen mi fic, esas 12 personas que me siguen en el blog, no son muchas pero GRACIAS :) Y por supuesto especial mención a mis chicas de twitter que leen siempre mis capítulos hablo de: la mejor publicista Didii PuddLessSimplicity, PauliiGarciia y a mi niña Patri, niña quedan 13 días para conocernos y darte un buen achuchón. Os quiero mucho chicas :)

1 comentario:

  1. vale, entiendo perfectamente porque te gusta tanto esque capítulo, porque a mi, pf, enserio nose ni que decirte hahaha esque me a encantado.
    Cuando danny le dice:"Miles de chicas no lo sé, pero yo me muero por tí", aaawn! que monosidad, y el párrafo en el que sale love actually.. AMO esa película y me han entrado unas ganas increíbles de verla! En resumen.. que capítulo genial, como siempre, pero en esre te has superado.
    PD: Me ha echo mucha ilu lo del ultimo párrafo! como para no leer tu fic.. estoy enamorada de él

    ResponderEliminar